Alegría en Gambo, un proyecto en Etiopía
Iñaki Alegría es un médico licenciado y formado en el Hospital Clínic de Barcelona y especializado en Pediatría. Según nos cuenta, el entiende la medicina como un acto de amor sobre todo hacia los niños, ya que son los más vulnerables. Ha realizado varios proyectos de cooperación y asistencia sanitaria, por lo que ha comprobado de primera mano la pobreza y enfermedad de los países y regiones más pobres.
Ahora cumple 5 años viviendo en Gambo, Etiopía, y está construyendo en el Hospital General otro tipo de medicina, una medicina que no entiende de fronteras ni discriminaciones. Si nos remontamos dos años atrás, Iñaki y su pequeño equipo crearon una ONG llamada Alegría sin fronteras, donde llevan a cabo proyectos en el hospital que da acogida a los enfermos de todos los poblados de los alrededores.
Desde Suecos colaboramos con ellos para ofrecerles nuestros zuecos y poderles ayudar, como nos cuenta Iñaki, a evitar contagios, a mantener la higiene del hospital y de la propia gente. Proporcionamos nuestro calzado tanto a médicos como a pacientes y así podemos evitar que caminen descalzos, que es una de las vías de contagio y suciedad en el país.
El hospital de Gambo es el único centro de la región por lo que se junta gente de los pueblos cercanos y no tan cercanos. Nos cuenta también que la gran mayoría de los hospitalizados son niños y la gente allí no tiene recursos para muchas veces curarse. “Nuestra tarea –añade– es intentarlo en todos los casos.”
El problema de los hospitales de países como Etiopía es que tiene muy pocos medicamentos al alcance y el personal no está cualificado. El trato no es nada agradable y la gente deja de ir. Por este motivo, el proyecto de Iñaki tenía como objetivo reactivar el centro general de Gambo, para otorgar un servicio de calidad y mejorar las condiciones de vida a la población. Uno de los problemas más comunes son los embarazos y partos de riesgo por lo que se activó una campaña de sensibilización entre los usuarios. El próximo paso será adquirir una ambulancia 4×4, ya que los caminos entre pueblos son intransitables y las distancias entre ellos son muy grandes.
Todavía falta mucho camino por recorrer, la atención sanitaria no está cubierta por el gobierno y no es del todo gratuita, aunque el médico nos explica que se trata de algo simbólico. Sin embargo, no dejan a nadie fuera de la atención médica por lo que si alguien no tiene ningún recurso económico, existe un pequeño fondo de ayuda para cubrirlo.
Cualquier ayuda es importantísima para la ONG que tanto aporta a la población, la difusión y el reconocimiento de esta podrá mejorar esa red de atención que buscan. Por ello, en Suecos nos decidimos a donar nuestro calzado sanitario y antibacteriano, saludable para todos, que les puede ser de mucha ayuda en momentos tan delicados de enfermedad y cura.
Si quieres colaborar con Alegría Sin Fronteras, cualquier ayuda es buena y puedes hacerlo aquí.
